lunes, 28 de febrero de 2011

Capítulo 73

He decidio subir este capítulo hoy como disculpa por la tardanza de el capítulo 72, espero qe os guste.


JOAQUÍN.....

No me podía creer lo qe me había dicho Luna, me había dejado totalmente desconcertado, y sin reprocharle nada dejé qe se fuera, no fui ni capaz de pedirle y rogarle una vez más qe se qedara, qe me perdonara, qe lo qe he echo es el mayor error de mi vida, y qe haría todo lo qe fuera por qe me perdonara, qe estaba súper arrepentido, y qe nunca me perdonaría a mí mismo el daño qe le he echo, pero fui inútil, en cuando escuché de la boca de Luna " me iré y nunca más volverás a verme" me qedé sin palabras anclado en ese banco del parqe, en el mismo qe miles de veces yo y Luna nos habíamos comido a besos, en el mismo qe la cogía de la mano para decírle qe pasara lo qe pasara siempre estaríamos juntos... pero esa promesa se la ha llevado el frío viento de la mentira, la mentira la cual ha echo qe Luna decida irse de mi vida para siempre. Cuando ya había cogido fuerzas para poder ponerme de pie, me dirigí a casa, necesitaba descansar, estaba totalmente agotado moralmente y sentimentalemente.

-Hijo..... Dijo Francisca nada más verme entrar en casa.

Yo ni dije ni hice nada.

-Ha conseguido hablar con ella? Volvió a insistir.

-Ahora no Francisca. Dije con un hilo de voz qe apenas podía escuchárseme con claridad.

Cáminé vagamente hasta la habitación y me senté en el borde de la cama, coloqé mi cabeza entre mis manos y comencé a llorar... irremediablemente estaba solo, solo ante la vida, ya qe para mí Luna era TODO y ahora ella no estaba, me dejé caer de espaldas en la cama, qedando completamente hundido en el profundo dolor de la culpa, de la desilusión, de la soledad, me qedé qieto durante  nosé cuanto tiempo mirando al blanco techo de la habitación.

-Joaquín....

Alguien me llamaba, sin ni siqiera darme cuenta me había qedado dormido, lentamente abrí mis ojos, y pude ver qe Francisca estaba de pie mirándome.

-Hay, me he qedado dormido, qe hora es?

-Son las 4 de la noche, has estado dormido varias horas.

-Ufff estaba agotado.

-Bueno... y has logrado hablar con Luna hijo mío??

-Sí. Dije apartando mi cara para qe Francisca no pudiera ver las lágrimas qe comenzaba a asomar por mis ojos.

-Y qe te ha dicho?

-Pues qe se va, te dije qe si se enteraba de esa locura de la cual estoy arrepentidísimo, se iría.

Francisca colocó su mano sobre mi hombro, y yo me lebanté, cogí mi cazadora y salí de la habitación sin ni siqiera verla a la cara.

-Hey, a donde vas a estas horas??

-Nosé.

Abrí la puerta y salí de casa, sin saber qe hacer caminé por la calle, desolado por el dolor, decidí entrar en una bar qe aún estaba abierto a las 4 de la mañana de un martes, primero me qedé en medio del bar observando qe apenas había gente, solo dos chicos jugando al billar y una chica sentada en una mesa del fondo bebiendo una cerveza.

-Hola, qe le pongo? Dijo la camarera del bar.

-Hola, mmmhhh, qe es lo más fuerte qe teneis??

La chica puso una cara de asombro y amablemente contestó mi pregunta.

-Pues mira, tenemos esta absenta qe nos han traído de cuba.

-Pues póngame un vaso de esa absenta, pero está segura qe es lo más fuerte qe teneis?¿ Insistí de nuevo.

-Sí si, por supuesto.

La chica me sirvió el vaso tal y como le había pedido, me lo bebí de un sorbo, sin ni siqiera es esperar a qe el hilo enfriara un la bebida.

-Oye!! Dije alzando un poco la voz para qe la camarera me escuchara ya qe estaba al otro lado de la barra.

-Dime.

-Me pone otra copa porfavor?

-Si.

Y así fue, de nuevo me sirvió otra copa, y así hasta 5 copas, el alocohol ya estaba comenzando a hacer efecto en mi débil cuerpo, no estaba acostumbrado a beber.... llamé de nuevo a la camarera una sexta copa, pero no me la qiso servir, dijo qe ya había bebido bastante.

-Oye, yo soy el qe pago, asiqe pónme otra copa!! Dije dejándo caer con fuerza el vaso sobre la barra lo cual hizo un ruído el cual la poca gente qe había en el bar se asustó.

-No, has bebido bastante ya chico, váyase a casa.

-Que no!! Repetí alterado.

Enseguida vía como los chicos qe estabam jugando al billar se dirigían a la barra donde estaba sentado.

-Qe pasa Laura, le está molestando este chico? Dijeron a la vez qe no me qitaban el ojo de encima.

-No, solo qe no qiero servirle otra copa y se está poniendo un poco chulo.

Entre los dos chicos me lebantaron de la butaca dejándome caer al suelo, yo enseguida me levanté y escupí a la cara el chico qe tenía enfrente de mí, estaba tan borracho qe me daba exactamente igual lo qe me pudieran hacer, solo qería emociones fuertes.

-Fuera de aqí o tendremos qe echarte nosotros!! Gritaban los chicos.

-Dejénlo, está borracho no sabe lo qe hace!!! Decía la camarera

-No quiero!!! Respondí encarándome a ellos.

-Ah no??? Pues te echaremos nosotros.

Los chicos me echaron a empujones y a patadas del bar, la camarera se interpuso entre los chicos para qe me dejaran en paz pero fue inútil, no dejaban de dar empujones y patadas, pero yo en ningún momento dejé de insiltarolos y de intentar encararme con ellos, pero fue inútil, tenía mucho alcochol en el cuerpo y apenas podía sostenerme en pie.

-Hijos de puta!! Grité cuando ya estaba fuera del bar y los chicos estaban decididos a irse.

-Qe has dicho chulo de mierda?? Dijeron dirigiéndose hacia mi.

Yo no dije nada, esta vez corrí, corrí todo lo qe pude hasta qe miré hacia atrás y pude ver qe nadie me seguía, paré en seco a coger aire, estaba cansadísimo, asique me dejé caer al suelo, no podía sostenerme en pie.

-Hola... estás bien?? Dijo alguien a mis espaldas.

-Y tu qien eres?

-Soy Laura la camarera del bar, ví como esos chicos te echaban de muy malas formas del bar.

-Qe qieres?? Dije levantándome como pude del suelo.

-Nada nada, tranqilízate, solo qiero saber como estás. Dijo la chica agarrándome para qe no me cayera de nuevo al suelo.

-Mal - comencé a llorar - muy mal.

-Qe te ha pasado?

-Mi novia me ha dejado.

-Uii cuanto lo siento.

-Bueno, me voy, gracias por preocuparte por mí vale?

-No pasa nada, chao.

-Chao.

-Oye!! Dijo la chica de nuevo.

-Si? Dije girando la cabeza como pude.

-Como es tu nombre? Tú sabes el mío y yo el tuyo no.

-Joaquín.

-Encantada Joaquín.

-Igualmente.

La chica se dió media vuelta y se fue de nuevo al bar del cual esos matones me habían echado, y yo también eché a andar, de camino a casa, Luna volvió a rondar por mi cabeza, y sin ni siquiera darme cuenta mis dedos habían marcado el número de Luna y la estaba llamando, necesitaba escuchar su voz.

" El teléfono al qe llama esta apagado o fuera de cobertura en este momento"

Fue inútil, Luna tenía el teléfono apagado, asiqe decidí mandarle un sms, necesitaba hacerla saber qe ella aún seguía en mí y qe no me olvidaba de ella.

"Te quiero, perdóname"

Eso es lo qe le puse, se lo envié, y como un tonto me senté en un banco a esperar una respuesta.


-Oiga, oiga chico!! Alguien me estaba zarandeando, abrí mis ojos como pude, ya qe el sol cegador apenas me dejaba abrirlos con claridad.

-Que? que pasa? Dije aturdido y mirando a mi alrededor.

-Que se ha qedado a dormir en el banco.

-Que??!!!

-Que se ha ...

-Ya, ya he escuchado. Dije interrumpiendo al señor.

-Pues eso, qe necesitamos qe salga de aqí, tenemos e barnizar los bancos de este parqe, lo siento.

-No... no pasa nada. Dije sin parar de mirar a mi alrededor.

Tal y como me dijo el señor salí de allí, pero no entendía nada, como me había qedado dormido en un banco? No recordaba nada... Dios... me dolía mucho la cabeza y mi cuerpo estaba dolorido, arremangué mi chaqeta para ver qe hora era, y pude ver como en mi brazo tenía un negrón muy grande, en el cual aún se podía ver qe era reciente, ya qe había sangre seca. Yo mojé mis dedos con la poca saliva qe había en mi boca y limpie la sangre.

-Dios!! Son las 12 de la mañana! Dije sorprendido al fijarme en el reloj.

Bajé la chaqeta y eché a andar. Al meter la llave en la fechadura para entrar en casa, sentí como Francisca era más rápida qe yo, al abrir la puerta, Francisca se qedó mirándome de arriba abajo, y poco después colocó su mano sobre la boca...

-Joaquín.... qe te ha pasado??

-No losé.... Dije bajando la mirada.

Sin más.. Francisca se echó a un lado para dejarme pasar y cerró la puerta, ni un solo momento dejó de mirarme con esa cara, se podría decír qe hasta de sus ojos unas lágrimas comenzaban a asomarse.

-Voy a mi habitación. Dije sin mirarla a la cara.

-Pero Joaquín... donde has estado todo este tiempo?

Yo seguí caminando hacia la habitación, cerré la puerta y me qedé de pie qieto, mi cuerpo estaba débil y mis piernas comenzaban a doblarse, apenas sin fuerza anduve 4 pasos hasta qe porfín me aferré con las manos a la cama y allí me dejé caer.

1 comentario:

  1. Se merece ese sufrimiento, está muy mal lo que hizo, se lo tiene bien merecido.....

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